El Boom Latinoamericano

 Este Boom de la narrativa se produjo en la década de los sesenta, el cual
 propagó un vasto conocimiento mundial, desde el punto de vista de los
 críticos como también de los lectores. Este surgimiento dio paso a una
 explosión de una narrativa pura y renovada, lo que permitió llevar a nuestra
 literatura alrededor del mundo. El problema a plantear será entonces cómo
 fue el desarrollo y madurez de la narrativa del llamado boom literario latino-
 americano. Para poder desarrollar este tema se plantearé elementos o ideas
 centrales. En primer lugar se tratará sobre la iniciación o revelación de este
 Boom literario en América Latina e Hispanoamericana. Luego hablaré de la
 madurez y amplificación de las técnicas narrativas del boom. Y por ultimo
 abarcaré algunos fenómenos del boom.


Este eco sigue sonando todavía como Big Bang que dio origen al renacimiento
 de la novela contemporánea. Para destacar esta etapa importante en los
 países latinoamericano se el 12 de febrero se cumplieron 20 años de la muerte
 en París de unos de los representantes de aquel boom literario, Julio Cortázar,
 ya que ésta es una buena ocasión para evaluar su herencia. El propio Cortázar
 dijo que el boom era "la más extraordinaria toma de conciencia por parte del
 pueblo latinoamericano de una parte de su propia identidad es decir que el
 boom no lo hicieron los editores, sino el público atraído por un nuevo cambio
 en la literatura que se tenia en el momento. Verdaderamente, el éxito de las
 novelas de García Márquez, Vargas Llosa o Alejo Carpentier coincidió con la
 expansión de un ideal hispanoamericano de transformación social, en los 60 y
 primeros 70. Esta explosión de creatividad cultural y social llegó a Europa
 como un soplo de aire nuevo en un momento en que la novela europea daba
 claros signos de asfixia.


El "boom" latinoamericano: no es un movimiento, ni una escuela, es producto
 de la casualidad, una creación inesperada de jóvenes talentos que
 demostraron al mundo que Latinoamérica era capaz de crear cosas originales,
 atrayentes y entendibles. Se podría decir que se inició cuando elPrem i o




 Biblioteca Breve de la Editorial Seix Barral fue a manos de un latinoamericano
 llamado, Mario Vargas Llosa, por su novela La ciudad y los perros en 1962;
 publicación que según muchos críticos, analizan que ocurre el cambio decisivo
 en la recepción mundial de las letras latinoamericanas. Éste es el medio más
 poderoso de entrada de la narrativa latinoamericana, es decir ayudó a la promoción de muchos escritores de esta nueva generación de la narrativa y 
que más adelante encontraría su apogeo en Europa y Norteamérica. 


El año de 1967 fue un año para recordar a Miguel Ángel Asturias, quien
 obtendría el Premio Nobel ese año, aunque en la actualidad nadie lea sus
 libros; Vargas Llosa el Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos por La
 Casa Verde, Fuentes el Biblioteca Breve por Cambio de piel, el cubano
 Guillermo Cabrera Infante publicaría -aunque con cortes por la censura
 franquista- Tres tristes tigres y, sobre todo, Gabriel García Márquez hizo
 pública una novela que había preparado toda su vida y por la cual había
 pasado las de Caín durante sus dieciocho meses de redacción con Cien años
 de soledad. La novela fue admirada unánimemente, Gabo alcanzó fama
 universal, sus libros anteriores -que no pasaban de la medianía, a pesar de
 que hay quienes adoran la novelita El coronel no tiene quien le escriba
 (1958)- fueron reeditados rápidamente y en 1982 obtuvo un merecido Premio
 Nobel de Literatura. Hay mucho que decir sobre Cien años de soledad, así
 como de El amor en los tiempos del cólera (1985), novela que Gabo
 considera mejor. Pero boom seguía fuerte, en 1970 cuando ya estaban en su
 candela de trampolín a la fama Juan Carlos Onetti (Junta cadáveres, 1964),
 Alejo Carpentier (El siglo de las luces, 1962), Jorge Luis Borges y Juan Rulfo.
 En ese año el chileno José Donoso presentó El obsceno pájaro de la noche
 que por cierto, también ha escrito el único documento "desde adentro" sobre
 el boom: Historia personal del "boom". Por consecuente en 1973, Vargas Llosa
 publica la estupenda Pantaleón y las Visitadoras, en 1974 el paraguayo
 Augusto Roa Bastos publica una novela capital sobre dictaduras
 latinoamericanas, Yo, el Supremo, en 1975 García Márquez también habla
 sobre dictaduras en El otoño del patriarca y Carlos Fuentes con la novela,
 Terra Nostra, gana el Rómulo Gallegos en 1977. Explorando y observando lo
 que fue el boom hispanoamericano veinticinco años después todos los otros
 escritores siguieron sus hábitos escribiendo novelas.




 Sin embargo ay que destacar que Mario Vargas Llosa fue y sigue siendo el
 escritor más premiado de esta etapa , porque a los treintaitrés años publicó
 su mejor novela ambientada en el Perú, Conversación en La Catedral (1969)
 y en 1981, La guerra del fin mundo. García Márquez y Carlos Fuentes siguen
 escribiendo y vendiendo libros y ampliando su gran fama en el mundo, Julio
 Cortázar escribió después de Rayuela otras tantas novelas que, como Asturias,
 nadie lee como 62/Modelo para armar, Libro de Manuel,además de varios
 cuentos. Falleció de cáncer en febrero de 1983. Lo suplantó Carpentier (1980)
 y le siguieron Rulfo y Borges (1986), Juan Carlos Onetti (1994) y José Donoso
 (1996).


Algunos fenómenos del boom.




El ''Boom'' habría sido un fenómeno histórico poseedor de características
 múltiples unido a la riqueza de los procesos culturales y sociales del hombre.
 La explosión que dio este fenómeno no sería sólo comercial. El escenario
 literario mundial de los últimos siglos siempre habría sido protagonizado por
 escritores europeos, en su mayoría de países dominantes más desarrollados.
 A mediados del siglo XX y a guiados por la suba en las ventas en nuestro
 continente, llegaría a esos territorios del viejo mundo un número importante
 de escritores latinoamericanos nuevos.




 Aunque la figura central del boom es García Márquez y su obra Cien años de
 soledad, publicada en 1967, hay muchos autores y obras anteriores a esa
 fecha, que se han vinculado a este fenómeno. El cubano Alejo Carpentier, por
 ejemplo, o el argentino Julio Cortázar, ya estaban consagrados como
 escritores quienes no habían sido masificados como escritores en los `60. Juan
 Rufo, de México; José María Argüidas, de Perú; Guillermo Cabrera Infante y
 José Lezama Lima, de Cuba; Jorge Luis Borges y Ernesto Sábato, de Argentina;
 y Juan Carlos Onecí, de Uruguay, entran en la renovación temática y
 estilística de la literatura latinoamericana e hispanoamericana. No podemos
 dejar de nombrar a Manuel Rojas nacido en Chile, cuya obra Hijo de Ladrón,
 expresa los principales motivos de la literatura contemporánea: la
 marginación social, la angustia, la incomunicación y la impersonalidad de la
 sociedad de esta etapa.
 En la década del sesenta se produjo un crecimiento notable de la literatura
 latinoamericana, desembocando en un vasto reconocimiento mundial, tanto
 desde la crítica especializada de algunos escritores como la del público. La
 aparición de excelentes novelas que poblaron un espacio que estaba vacío en
 nuestra sociedad, dio pie al logró de llevar nuestra literatura alrededor del
 mundo.




 José Donoso, chileno, en su Historia personal del boom, destaca el
 surgimiento de este fenómeno que -... quizás valga la pena comenzar
 señalando que al nivel más simple existe la circunstancia fortuita, previa a
 posibles y quizás certeras explicaciones histórico-culturales, que en veintiuna
 repúblicas del mismo continente, donde se escriben variedades más o menos
 reconocibles del castellano, durante un período de muy pocos años
 aparecieron tanto las brillantes primeras novelas de autores que maduraron
 muy o relativamente temprano - Vargas Llosa, Carlos Fuentes, por ejemplo - y
 casi al mismo tiempo las novelas cenitales de prestigiosos autores de más edad - Ernesto Sábato, Onecí, Cortázar -, produciendo así una conjunción espectacular".En un corto período surgieron, novelas como La muerte de Artemio Cruz, La ciudad y los perros, La Casa Verde, El astillero, Paradiso, Rayuela, Sobre héroes y tumbas, y Cien años de soledad.-acota Donoso.


 Lo que caracteriza a los escritores que se ubican dentro del 'boom', es que se
 trata de intelectuales exiliados de sus países, que desde Europa tomaron
 parte de la causa latinoamericana, y se hicieron eco de ella. Vargas Llosa dijo
 años más tarde que "había llegado a Europa siendo peruano, y allí me descubrí
 latinoamericano". Esta necesidad de pertenencia a una cultura que les era
 común, con diferencias regionales, terminó por conformar un grupo de lucha
 que termino reclamando por las libertades, los derechos humanos, y la
 Revolución Cubana y nicaragüense.




 Aún cuando no es claro cuándo comienza y termina este fenómeno, se ubica
 dentro de él a un grupo selecto de escritores, quienes en algún momento
 fueron acusados de ser parte de una mafia con contactos secretos en las
 editoriales, de forma tal que tuvieran un éxito asegurado. El tiempo demostró
 que las acusaciones eran mentiras y que la calidad narrativa y estética de




 Mario Vargas Llosa, Julio Cortázar, Gabriel García Márquez, Carlos Fuentes y
otros no pertenecían a ninguna editorial, sino que se trataba de un redescubrimiento de las páginas más notables de la historia del arte latinoamericano.


 Los escritores del ''Boom'', destacando lo mejor de la literatura europea,
 mostraron otra visión de expresiones culturales de Latinoamérica e
 Hispanoamérica a través de la literatura. Pero esta escritura sería un proceso
 estético iniciado con anterioridad, La Nueva Narrativa de América Latina, de
 la cual podría decirse que el Boom formaría parte. Pero al mismo tiempo, este
 se distinguiría de él por su desprendimiento de las élites intelectuales para
 sumergirse en la aceptación popular. Esto haría que sus lectores se
 transformasen en gran parte del crecimiento de este fenómeno.




 Una poética nueva con destacados puntos en común en todo el continente
 surgiría de forma paralela al Boom. Alejo Carpentier dijo que las novelas de
 América Latina serían todas ''barrocas'', al tiempo que definiría ''lo real
 maravilloso'' en el prólogo de su novela ''El Reino de este Mundo''.
 Precisamente en las novelas el pasado colonialista siempre permanecería y en
 el pasado como el tiempo presente formarían una única masa popular.




 Contexto socio-histórico del ''boom'': 


Algunos sucesos históricos garantizarían el terreno para la llegada del Boom. 
Si bien no se trata de una relación de causa y efecto. Como explicara Ro l a n d
 Barthes sería precisamente la historia quien construiría al autor y su obra, y


no al contrario. La historia también participaría en la construcción del lector y por eso pondríamos al emisor y al receptor en un mismo nivel. Ese contexto se da con la Primera Guerra Mundial en 1914, seguida por la Revolución Rusa en 1917. Luego vendrían la crisis económica de EE.UU. en 1929 y la Segunda Guerra Mundial en 1945. El último componente sería la Revolución cubana,
 ocurrida en 1957.
 Primera Guerra Mundial: La salida de la bella época, de la Europa occidental,
 nos deja dudas ante un mundo convulsionado y desequilibrado mucho más que
 tranquilo, como podría esperarse. La sociedad se choca con las nuevas
 tecnologías y los mercados internos provocarían una disputa por la búsqueda
 de nuevos mercados en todo el mundo.
 Estados Unidos sería una promesa creciente yKafka comenzaría a escribir casi
 al borde de la guerra (1912) su inconclusa ''Amérika'' que él llamará ''la novela
 del desaparecido''- en la que mostraría las necesidades del hombre extranjero,
 un hombre tragado por la idea de oportunidad y los efectos sociales de un
 crecimiento desmedido.




 La Revolución Rusa: En un país tan enorme como atrasado en la historia
 ocurriría un acontecimiento de efectos en el plano moral y político de gran
 alcance. La misma crisis económica de la 1ª guerra provocó, en octubre de
 1917, la primera revolución obrera marxista. Junto a ella, diferentes
 manifestaciones estéticas y artísticas se expresarían. Esta fuerza
 contaminante permanecería durante muchísimos años caracterizando a la
 renovación intelectual del siglo XX en todas partes, incluso en EE.UU. y los
 países de Latinoamérica.




 El Crack Financiero de 1929: Mientras en la URSS se fortalecería el régimen
 perverso del ''stalinismo'', en EE.UU. se producían ricos en minutos con la
 venta de acciones en el mercado, hasta ocurrido el gran estallido de Wall
 Street. Esta situación alimentaría la transformación de los valores estéticos,
 artísticos y morales, y profundizaría una ruptura total con el pasado. Las
 vanguardias continuarían y sus manifiestos mantendrían su contenido político-
 social. El intelectualFreud decía que el inconsciente, el automatismo y una
 cierta anarquía en las manifestaciones artísticas caracterizarían al
 surrealismo, que apareciera en 1924 y en la Torre de Marfil de André Bretón.
 Después de su paso por México, daría un salto en sus implicancias políticas y
 tomaría posición contra el stalinismo soviético.




 La Segunda Guerra Mundial: Alemania buscaría dominar Europa con la
 ocupación de territorios y el recrudecimiento del modo de gobierno de la
 figura de Adolf Hitler. Con él se consolidaría un proyecto de extrema derecha,
 el ''Nationalsozialist''. La post guerra traería este modelo a Latinoamérica
 dando formación ideológica a los dictadores de los futuros gobiernos que
 practicarían el ''terrorismo de Estado''. En Europa, el triunfo de los comunistas
 ante los nazis habría significado un prestigio que luego sería congelado con los
 acuerdos de Falta yPo tsd a m firmados porChurchi l, Roosevelt yStalin. Esa
 división esteoeste era el viejo orden mundial, que sería destruido en 1989
 con la caída del Muro de Berlín. Los judíos habrían sido siempre un pueblo
 nómada y la ''Tierra Santa'', estaba ocupada por palestinos. Pero después del
 Holocausto y ya finalizada la guerra, un fuerte movimiento con base en
 capital norteamericano crecería hasta la creación del Estado de Israel.




 La Revolución Cubana (1957): Este hecho habría tenido sus consecuencias 
estéticas más próximas del propio Boom, que se habría hecho visible en los años sesenta. Sería el ''Broche de Oro'' en nuestro continente de todas rupturas
 comentadas. Una vez más se pondría en protagonismo a la cultural burguesa y
 se generaría una explosión en términos creativos en donde los números de la
 moda y la automatización de los medios de producción se entrelazarían con la
 renovación estética que surgiría. Black Power, Flower Power, hippies,
 pacificación, esta rebeldía generalizada se fortalecería con la derrota del
 ejército estadounidense en Vietnam y por la lucha contra el racismo en las
 figuras de Malcom ''X'' y Martin Luther King. Con el asesinato de ellos y de J. F.
 Kennedy, se consolidaría el ''tiranicidio'' como forma de resolver conflictos
 sociales. Pero Cuba sería un ejemplo no reiterado en ninguna parte en la
 batalla por lasutopías. Los sangrientos golpes de estado en Latinoamérica
 serían dirigidos por la CIA de EE.UU. y con ellos se iniciaría un infeliz recorrido
 de retrocesos que afectaría también al ''boom''.




 Con las dictaduras militares, además de cerrarse un ciclo de economía, en
 Latinoamérica buscarían censurar las ideas, lo que afectaría directamente a
 los lectores. Se terminaría así con la ''moda'' de la lectura y disminuiría
 también el número de escritores de etapa inicial del boom. Esto quiere decir
 que no sería visible esta lectura como sí ocurriera durante los años de
 crecimiento en la lectura de mediados de siglo XX.